Venus es un planeta que no sabe enfriarse.

Los astrónomos no están seguros de que, en estos momentos, haya algún tipo de actividad volcanica en Venus. De acuerdo con la teoría que explica las erupciones a escala planetaria, la liberación del calor acumulado en el interior hace 500 millones de años debería de haber reducido la presión del magma. Sin embargo, algunos indicios permiten suponer que algunas zonas pueden continuar activas, las sondas robot Venera 11 y Venera 12 atravesaron una tormenta eléctrica durante su descanso a la superficie. Por algunas razón que se desconoce, este fenomeno suele darse en áreas de actividad volcánicas. La sonda orbital europea Venus Express detecto asimismo una potente luminiscencia en la capa mas alta de la atmósfera venusina, además de una notable variación anual de las cantidades de dioxido de azufre , lo cual permite pensar en la existencia de volcanes activos que lo expulsen con cierta regularidad.

Los cientificos emplearon los mapas de Venus obtenidos por la sonda Magallanes para datar las diferentes áreas del planeta en función del numero de cráteres acumulados. A pesar de que la densa atmósfera protege la superficie de una gran cantidad de impactos, algunos meteoritos logran atravesarla e impacta contra la corteza. A partir de estudios comparados con la Tierra y la Luna , se cree que este fenomeno se ha mantenido establemente bajo en esta region del sistema solar durante los últimos 3000 millones de años. En consecuencia, cuanto mas antigua sea la superficie, mayor tiempo habrá estado expuesta al bombardeo y mayor sera el numero de cráteres. Sin embargo, las erupciones volcánicas modifican por completo la orografía del planeta y borran las huellas del pasado.

Paisajes infernales. Después de que toda el agua se hubiese evaporado miles de millones de años atrás, la orografía de Venus es el producto de la acumulación de lava candente vertida por los volcanes que cubren todo el planeta.